lunes, 1 de mayo de 2006

Tu marcha

No sé cómo explicar; después de tanto tiempo hablando de tu marcha... No he sido capaz de creerlo hasta que te he visto subir al tren.
Perdí la cuenta de las veces que hoy te pedí que te quedaras a mi lado, que no te fueras nunca, lo decía con boca chica convencida de que no te irías; te susurré al oído palabras viciosas para intentar convencerte; te abracé lo más fuerte que pude; me amarré a tu cuerpo para evitar que te alejaras, pero...
Te has ido.
Hoy es el primer día de un infinito silencio.
Hoy ya no me queda más que tu ausencia.
Hoy ha sido tu marcha, hoy empecé a marchitar.
Vuelve pronto, vuelve mi vida...

No hay comentarios: