viernes, 4 de marzo de 2016

Entre bambalinas

El mago metió la mano en el sombrero, pero no halló lo que buscaba. Como el público se empezaba a impacientar, insistió una vez más. Agarró con firmeza lo primero que encontró sin percatarse de que era su propio pie derecho y tiró con todas sus fuerzas. Entonces, el mago empezó a entrar y salir de la chistera sin parar. La gente aplaudía con entusiasmo al ver tal espectáculo; mientras, el conejo observaba riendo a carcajadas entre bambalinas.

sábado, 30 de enero de 2016

El concierto

Lo supe desde el mismo instante en que me senté: el reloj se detuvo y me vi envuelto en una extraña combinación espacio-temporal, en una perversa alineación de planetas que hizo sonar el teléfono, el timbre y la alarma del microondas, todo al mismo tiempo. Siempre igual. Pero esta vez no, esta vez no me dejaría vencer. Esta vez lo comprendí. Respiré hondo, pasé lentamente las páginas de la revista y cuando tiré de la cadena, el sonido de la cisterna se unió al concierto de timbres y alarmas. Definitivamente, hay cosas en la vida que no se pueden prever.