Últimamente navego entre aguas más calmas, más limpias, casi cristalinas.
Parece que la tormenta se ha dado un respiro y ahora sólo corre una leve brisa por mi ventana.
Por el momento he aparcado la idea del suicidio, ya no me parece viable y tampoco una salida a este temor que me sigue acechando aún en la distancia.
Dejadme disfrutar del poco sol que ahora trata de abrirse paso entre la nubes, sentir su calor en mi cara, en mi cuerpo, sentir que estoy viva de nuevo, que mis pasos parecen querer llevarme a buen puerto.
Hoy me siento distinta.
Hoy mi día me ha ofrecido algunos colores que han abierto un camino de esperanza...
1 comentario:
hay dias que llevan los colores salvadores, yo empece con el dia gris pero fue cambiando, asi creo que a veces la vida tambien, los sentimientos, nosotros mismos.
Y esperanza siempre.
Gracias por visitar mi blog.
Tus letras son muy intensas.
Un saludo.
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