viernes, 3 de abril de 2009

Volver del viento

Dejé que me llevara todo lo lejos que supiera, por senderos y caminos que nunca recorrí. Descubrí nuevos mundos que ni en sueños pensé que existieran y aún así, a pesar de tanta belleza, de tanta paz y silencio, necesitaba volver a mi casa.
Le supliqué que parara, estaba cansada del viaje, y detuvo su movimiento limpiamente, apenas sentí su aliento.
Me bajé de sus manos y se alejó unos metros, agachó la cabeza pesada de tristeza.
-- Nunca te dejaría, lo sabes. -- Le susurré.
Se dio media vuelta y se alejó con premura.
Por más que corrí tras él no conseguí alcanzarlo. Desandé lo andado, olvidé lo aprendido y desconocí lo sentido. Reencontré mi ruido y mi compañía.
Todo volvió al pasado.
Habiendo transcurrido algunos años, un vacío en mi corazón quedó prendado sin precio ni valor para vosotros, quise cubrirlo de lirios blancos para disimular su tibieza.
Supe de su amor por los recuerdos.
Supe de su calor por el color de sus fotos.
Supe de su olor por la esencia de su velo.
Supe de lo vivido porque dejé de sentir en aquel justo momento...
Tengo en un cajón guardada brisa fresca que me traiga sus besos, pequeños ósculos que antaño fueron pasión.
Espero con impaciencia cruzarme de nuevo en su camino, volver a dejarme a llevar por su viento indeciso..

1 comentario:

estoy_viva dijo...

Que bonito lo que has escrito, me alegro de volver a leerte, se te extrañaba.
Te deseo un feliz fin de semana
Con cariño
Mari