viernes, 19 de agosto de 2011

Una imagen vale mil vidas

Me pediste una foto y repasé todos mis álbumes sin encontrar la adecuada. Tuve que remontarme varios años atrás para encontrar a la Adela feliz, para dar con una imagen de mí que me gustara, que pudiera gustarte. Me sabía mal enviarte una foto de hacía tanto tiempo, pero si te mandaba la más reciente, la que me hice para el DNI, «saldría huyendo», pensé.
Cómo decirle a alguien que un día fui especial cuando ahora no lo soy, se enamoraría de la otra Adela, de la que apenas recuerdo, la única que tendría posibilidades de iniciar una nueva vida.

1 comentario:

Sangre dijo...

Por supuesto, que puedes sentarte a mi lado a contemplar mi Mar querida Ariola, es un privilegio que guardo para mis buenos amigos y tu, aún en la distancia estas entre ellos, que ya son unos cuantos años compartiendo este espacio eléctrico, amiga mia...

Repase tus últimos poemas, y relatos, son de una gran delicadeza y belleza...veo que la musa esta a tu lado, dejala mejor a ella, y que las visitas de la tristeza sean mas espaciadas...;)

un muy fuerte abrazo..

Carlos