Ser dos es lo mejor que le ha pasado a
madre, ser dos es lo mejor que nos podía pasar a nosotras. Nadie
entenderá jamás ese hilo invisible que la genética tejió
uniéndonos para siempre.
A Lucía, desde el corazón
Un rincón para la palabra, el silencio, para todo aquello que nunca nos dijimos...
1 comentario:
Es verdad que es una gran suerte que fueran dos y no una.
Es cierto que esos hilos invisibles y calientes se mantienen aunque algunas veces parece que se rompieran.
Fue un gran esfuerzo, pero mereció la pena.
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